
Elaboró: Dr Emmanuel Gálvez – Coordinador académico Atenea México
En este artículo publicado en la revista de Archivos de Cardiología de México, por autores pertenecientes al Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, los autores se centran en describir el descubrimiento del a electricidad y su aplicación posterior en el área de la cardiología.
Hoy en día, tenemos en la práctica clínica a disposición los electrocardiogramas que nos permiten medir la actividad eléctrica del corazón para diagnosticar diversas alteraciones en la conducción, en este artículo se hace una reseña histórica de cómo esto no siempre fue así y de cómo primero se descubrió la electricidad y posteriormente se realizaron estudios en animales que permitieron conocer que existe una actividad eléctrica intrínseca en los seres vivos y que tiene muchas implicaciones.
Comienzan señalando que en la antigua Grecia ya se señalaba al término entumecer, sin embargo, no fue hasta el primer milenio de nuestra era que hubo un progreso significativo en el campo del electromagnetismo.
Posteriormente hacen mención que no existieron grandes avances durante mucho tiempo, hasta que en 1600 el físico inglés William Gilbert escribió su obra, Posteriormente mencionan algunos de los principales autores estudiosos de los fenómenos eléctricos y sus obras. Siendo de particular importancia las teorías de Benjamín Franklin.
Hecha esta reseña histórica sobre la electricidad, empiezan a describir las aplicaciones en la medicina y como un grupo de científicos en 1753 publican sus resultados sobre la estimulación eléctrica a músculo e hígado. Mencionan también a Leopoldo Caldani quien realizó estimulación en nervios y músculos.
Hacen un particular énfasis en Luigi Galvani, quien realizó un amplio estudio en el campo de la “electricidad animal” y lo puso a consideración de físicos, fisiólogos y médicos. Alguno de sus experimentos consistía en observar la contracción muscular en ranas tras la estimulación eléctrica. Galvani llegó a la conclusión de que los animales pueden producir energía eléctrica y a la que se llamó “electricidad animal”.
Posteriormente Alessandro Volta, físico de la Universidad de Pavia, tras su fascinación con los experimentos de Galvani, inventa aparatos para medir la electricidad. El artículo menciona al final el papel de físico francés Gabriel Lippmann que obtuvo un electrómetro capilar que fue capaz de trazar las señales eléctricas de la actividad eléctrica miocárdica, que fue el precursor del electrocardiograma. Así como Willem Einthoven, profesor de fisiología, que construyó el primer electrocardiógrafo.
Resulta muy interesante como tecnología diagnóstica que hoy tomamos por sentado, tuvo un gran antecedente histórico que permitió desarrollarla.
Bibliografía:
- A. de Micheli-Serra et al. How electricity was discovered and how it is related to cardiology. Arch Cardiol Mex. 2012;82(3):252-259.